Toco fondo

No es resignación. Es aceptación. José Ingenieros, en su libro “El Hombre Mediocre” que está por cumplir 100 años desde su primera publicación, dice, entre otras grandes verdades: “La rutina es el hábito de renunciar a pensar”…Jovellanos Fc, que está por cumplir 20 años, cuyos integrantes están más cerca de los 40 años de vida en esta existencia que lejos de los 30, quieren seguir pensando, reflexionando en su futuro, ver hacia donde va, que fue, que es, que quiere seguir siendo.

Tiempos de reflexión. Se vienen en la primavera jovelliana tras las consantes derrotas

Anoche en la Barraca se llegó a un punto de inflexión. Cristian Team vapuleó al equipo cuasi veinteañero por más de diez goles. Por momentos, con baile. De nada sirve, a estas alturas, especificar el resultado. Fue goleada. De esas que años luz gestaba el viejo equipo "Parodi". Jove formó con Juan al arco, Diego, Emi, Mato, Dudu y un invitado que cumplió con honor la difícil tarea de calzarse los colores del sentimiento jovellino, Hernán Quiroga.
De movida, CT golpeo primero y lastimo con dureza. Cuando Jove reacciono, ya tenía media docena en un marcador inalcanzable.
CT está completo. Incluso en los cambios que a fuerza mayor hace si faltan jugadores. Volvió “Hachita”, flamante papá de una hermosa niña. Gas retornó al arco en reemplazo de su titular Maxi y fue la figura junto a –y cuando no- Mauro. Y un enroque a falta de su goleador Fernando; el otro Cristian, el formoseño, que ofició de delantero y una vez que supo tomar el tiempo a la defensa jovelliana, fue implacable.
Jove hizo lo que pudo. Y si hizo lo que pudo fue porque no hizo lo que debía hacer. Volvió a jugar desordenado. Se extrañó la presencia del DT Walter como de los históricos Ale y Eduardito. Mato salvó la ropa del aplazo pero jugó solo. El resto hizo lo que pudo y como pudo.

Otro auto jovellino histórico. 1985/2007 -22 años- en la familia...donde quieras que estés querido Milki. 

Hacia el final del partido, se abrió el interrogante. Sucede que a diferencia del año pasado, Jove involucionó. Quizás por las lesiones que sufrieron muchos de sus jugadores. Puede por no permitirse planear una estrategia, víctima de caer en el prejuicio de que los malos de siempre jamás mejorarán y que los alguna vez buenos no empeoraron. Sea por lo que fuere, Cristian Team hizo otro camino. Sus históricos mejoraron su juego y supieron incorporar tres grandes jugadores como César -paraguayo y valiente tenía que ser- al goleador Fernando y al otro Cristian, un grandot formoseño al que Mato hizo enojar fechas atrás y todo Jove tuvo que persuadirlo de evitar la masacre.
Dura es la realidad de Jove que hasta incorporó a un arquero que no quiere ser: Juanma. Este hincha del Rojo tiene todo para hacer historia en Jove; abrir un nuevo capítulo en el primer puesto del que muchos se destacaron tal Hernán Montero, Marian Tumini y Tito Atila. El primero hincha de Boca, el otro de River y el tercero de Racing...todos sentimientos de clubes grandes...no llegó el turno del Rojo? Juan tiene dos opsiciones. O ser más de lo mismo o escribir una propia historia en Jovellanos. Nadie obliga a nadie. Jove hace tiempo dejó de ser ese grupo de adolescentes de linda infancia en los tristes años 90 para ser hombres en la era del pensamiento de un país que se quiere conocer. Nunca se puede querer lo que no se conoce.
La pregunta es ¿Jove se conoce?; ¿la cantidad de años hace a la calidad?; algunos integrantes de ambos equipos, Jove y CT, que vienen disputando cada uno en sus filas los distintos partidos, creen que es el momento de hacer conjuntos mezclados. Aburridos de un lado y enojados del otro. En los códigos de fútbol es un embole para los dos equipos en cancha que uno baile al otro. Ninguno aprende y hasta se pueden generar chispas, generalmente en el conjunto que sufre la paliza; pases de facturas, palabras filosas, insultos; sacar el individualismo y egoísmo infantil del sálvese quien pueda, la estupidez. Jove, en su prehistoria pasó por eso y ya maduró esa etapa. Siempre es preferible compartir la derrota con amigos que un triunfo con extraños. Y ayer fue un equipo aún más digno en otra derrota que viril en ese triunfo que tanto se hace desear.
¿Llegó la hora de aceptar que la única verdad es la realidad?...interrogantes que se plazma Jovellanos apunto de cumplir 20 años. Aceptar no es resignarse. Es la hora de las definiciones. A cara o cruz. La cantidad nunca hace a la calidad. Los integrantes de Jove se se conocen. Deben aceptarse y comprender  que ese gran equipo que es CT fue vencido en casi todo el 2012. Llegó hora de la verdad.

Y...siempre que llueve...¿para?

Mato con Pablito, amigo, sabio e hinca de Jovellanos

No todo es negro o blanco. La vida, las cosas, tienen otros colores. Entre dos extremos, lo esencial es lograr un termido medio. Aunque en tiempos de debate y en una sociedad que está por cumplir 30 años de democracia, abren los tiempos de debate, reflexión y opinión en el manto del respeto contrarestando los grises.
Se es o no se es. No hay imposibles. Aunque parezca que existen.
Este año 2013 pareciera que Jovellanos Fc no puede vencer a Cristian Team. Si bien Jove lo ha derrotado en alguna oportunidad, anoche, la aplastante victoria cristinista -y no se trata de la Presidenta de la Nación- que acrentó la diferencia entre partidos del historial de sus triunfos, obliga por momentos a pensar que CT es casi imposible de vencer.
Imposible no hay nada. CT venció a Jove 13  a 5, goles más, goles menos. Fue goleada más no fue baile.
El autoestima de Jove esta alto. Y con alegría se puede vencer. La tristeza no triunfa. Ayer, en la última noche calurosa de este anuncio de primavera en invierno, Jove presentó a Juan en el arco, y una defensa combinada con delantera: Eduardito, Diego Emi, Ale, al medio Mato, y el regreso de Dudu alternó en el banco de suplentes.
CT, equipo alternativo en reemplazo del flamante padre de familia Lucas y del hijo del viento Gas: otro Cristian y Cel Ayala, letales defensores que supieron maltraer y aguantar a los vaivenes de Jove que constantemente atacó y atacó al arco siempre excelentemente defendido por Maxi. Y el regreso de Fernando, el poderoso nueve del equipo de casaca azul, modelo Selección Nacional 1986/1994, tiempos de monarquía del mejor de todos los tiempos, Diego Maradona.

¿Músico, periodista, jugador de fútbol?...Dudu todo terreno

Es rara esta paradoja del fútbol. Porque CT gana y gusta al compás de Mauro y los goles de Fer. Es goleada pero no es baile. Jovellanos lucha y batalla hasta que Bigote anuncia el final de otro partido del miércoles.

Anoche, tuvieron que pasar veinte minutos para que se rompa el marcador. La 9 es sinónimo de gol. Así como la 10 es la magia, el 8 y el 5 los arquitectos del equipo y el 1 su sostén, el 9 tiene la obligación de meterla. Puesto ingrato no más que el 1, su antagónico. Los goles son los orgamos del fútbol. Fernando cumplió a pesar de la dura marca jovelliana que recibió. Y eso que Juan, quien no debería negarse a rescribir la historia en lugar que se destacaron Tumini, Montero y Atila, y en alguna oportunidad Leo Guglioto, evitó más de un disparo cetiano.
Hay que ajustar detalles en Jove. No hay que olvidar que este mismo equipo derrotó y con buen pelota a CT en varios cotejos del 2012 y ni hablar en los tiempos 2007/2009.
El DT Walter ya metió cambios estratégicos en fortalecer la defensa. El 9 es 6 al revéz. Que los delanteros jovellinos sean los defensores y toquen, se muevan como exige Mato, el 10, brillante por momentos y tan víctimas de un temperamento que lo traiciona. Se necesito todo Jovellanos para frenar a Cristian, que no es quien conoce a Mato desde los años ochentosos de la escuela República de Bolivia. Mato podría ser el Riquelme del Boca campeón Libertadores 2007; el Márcico de 1992, el Máquina Giampietro del Quilmes 2000, el Pibe Valderrama de la Colombia que humilló a la Argentina hace 20 años. Pareciera que opta por ser el Zidane enojado -y que por ende perdió- en la final del Mundo 2006
Todo quedó en cancha y las pasajeras broncas se convirtieron rápidamente en risas.

El auto de Ale y familia fue también de Jove. Su motor aún late en nuestro corazón

Un Cristian enojado y otro no. Cosas de fútbol. Felicitaciones por otro triunfo.

Jove está preparando su fiesta aniversario 20 años. Se necesitan fotos, recuerdos de estas dos décadas de cientos de anécdotas. Niños, adolescentes hoy hombres que siguen unidos, entre otras cosas, por la pelota y el fútbol. Campito FC, los recordados estadios Policia Federal y "Marangoni"-ambos en calle Hornos-; el estadio Ribera -calle Río Cuarto en la Boca- Good Game -avenida Montes de Oca- hasta la vieja cancha parqué del hoy remoldedado Sportivo Barracas. Predios que hoy que ya no están pero que siguen latiendo en el corazón de Jove. Los últimos moicanos del potrero, en la esquina de Suarez y Hornos, similar al tango casi centenario "Tres amigos" que entona en un pasaje la esquina Suarez y Necochea.
A eso hay que volver, como la fiesta que se aproxima fines del mes del próximo octubre. El ojo de tigre que inmortalizó la saga fílmica del boxeador Rocky Balboa no parpadeará en Jovellanos...que CT, hoy tan difícil de derrotar, se vaya preparando para cuando esto ocurra...en fútbol, en el manto de la amistad y el respeto. La pelota no se mancha.

Sangre, sudor y lágrimas

Jovellanos Fc felicita a Lucas y a su flamante familia, con el recién llegado

Cristian, uno de los artífices e inspirador de su equipo homónimo, fue contundente: "Si Jove no revierte la situación, tendremos que hacer partidos mezclado".
En los códigos barriales, mezclar los equipos tiene dos únicos significados: que uno de los contrincantes tiene de "hijo" al otro o que aburren los enfrentamientos.
Sea como sea, el ultimátum palpita veracidad.
Jovellanos puso en escena a su plana titular. Cristian Team repitió, una vez más, equipo de memoria.
Partido para alquilar balcones en la noche fría de un invierno que se reniega a morir y una primavera que tardará en nacer.
Cristian Team venció a Jovellanos una vez más. Pero costó sangre, sudor y lágrimas al grupo de Cristian, Maxi, Mauro, Gas y compañia, sin la presencia de Lucas, quien fue papá de una hermosa criatura esta semana que esta por terminar. Vaya desde aquí, la página web jovelliana las felicitaciones de quienes hacemos Jovellanos Fc, camino a los 20 años para Lucas, la flamante mamá y el bebé.
CT venció por un gol a un Jovellanos aguerrido que si bien sigue parándose muy mal en la cancha y por momentos se distrae en pleno juego, puso corazón y sangre, sudor y lágrimas. Sangre de sacrificio en su defensa, sudor de todos sus integrantes, lágrimas en el orgullo herido por cosechar otra derrota.
Jove formó con Juan, Diego, Ale, Edu, Mato y Emi, bajo la mirada atenta de Walter, quien de inmediato y apoyado por todo el equipo, debe armar una estrategia de juego dentro de las limitaciones y corazón de Jove.
Sin quitar méritos a CT, la mayoría de sus goles, fueron de lejos, ante un Juan arquero que promete y tiene todo para convertirse en ídolo en el difícil como alentador arco jovellino.

Capitanes. Amigos y figuras del equipo rival.

Ni siquiera pareciera que la causa física y la avanzada edad de sus jugadores -tampoco es tanto camino a los 40 de existencia- sea la causa de las derrotas. Jove no tiene una táctica. Los defensores suben y a los delanteros se les complica enfrentar la muralla que es CT en su defensa, direccionada por Mauro, el hijo del viento, Gas, Cristian, de juego y parecido físico a quien fuera volante de River -campeón 1996- y Boca, Julio César Toresani. Y eso que anoche a CT le faltó su goleador Fernando.
Jove necesita ordenarse. Volcar su experiencia. De nada sirve si impera el individualismo, máxima contraria del fútbol, deporte colectivo por excelencia.
Jove logró estar en más de una oportunidad arriba del marcador. Generó hasta discusiones de juego en el seno del rival. CT al igual que Jove es un equipo de amigos. Allí, la discusión no es solo lastimar al otro. No hay mala leche. Son equipos de gente adulta cerca de los 40 que lejos de los 30 que se juega, dentro del amateurismo existente, todo el coraje en cada pelota.
La rueda está en marcha. La revancha sigue en pie. Lo que no suma, hay que descartarlo. Quien se enoja, el infantil siendo ahora un viejo, pierde. Jove está fuerte. Ya se ordenará. Camino a los 20 años, se viene la fiesta jovelliana y se espera con ese triunfo que se niega a venir.