Perfiles I

Camino a cumplir 20 años desde este espacio cibernético - siempre con la idea de sumar y no restar- esta semana, casi todos los días hasta el sábado 26/10/2013 se realizará unas caracterizaciones bifurcadas en capítulos, estilos perfiles, de los integrantes de Jovellanos Fc, de quienes fueron y son, sus actuales jugadores. No son biografías; son descripciones humanas desde el cariño y el respeto que apuntan a desmenuzar sus personalidades para conocerlas y quererlas.

Las primeras entregas polulararán entre Walter, Ale, Eduardito, Dieguito, Dudu Iglesias, Mato Vidal, Martín  Mercado, el Marian Tumini, Tito Garrone, Atila Celaya, Diego "Yetis", Pereira y Juan Mendieta, entre otros jugadores. Además, habrá suplementos de algunas figuras que desfilaron a lo largo de estos 20 años jovellianos.

Aquí las primeras entregas:
Hoy Walter y Ale.


Walter "Calcaterra" Markevich

Enero de 1990. Al Mundial de fútbol en Italia del mes de junio de ese año se lo palpitaba demasiado lejos. No eran, ni muchos menos, tiempos de internet, ni de celulares. Esos aparatos semejantes quizá se veían en alguna película, solo se imaginaban en la realidad. Walter paseaba cerca de la casa de Gustavo Rúffolo, y en esa cuadra, entre la avenida Montes de Oca y Hornos, en la que justo pasaban Dudu y Emi. Rúffolo oficiaba de eslabón entre esos tres chicos. Mientras Walter lo conocía desde su grupo de amigos de la cuadra, con el mote de "Churrasco",  Dudu y Emi habían cursado casi toda la primaria con él en la escuela primaria que el año pasado cumplió 100 años, la República de Bolivia.
Porque antes de Jovellanos, estuvo, fugazmente, la calle Hornos. Allí vivían Ale, a la vuelta de Walter y de Churrasco y al lado -eran tres puertitas parecidas solo que de viviendas distintas; en una vivía Pablo; en la otra Ricardito Tula, amiguito de escuela de Mato el hermano menor de Emi y en otra Ale. Todas ubicadas enfrente de un campito que era ni más ni menos que las ruinas aún latentes de viejas casas expropiadas 12 años atrás para la confección de la autopista que une Capital Federal con la provincia de Buenos Aires.
Pelo largo, look estilo "Caniggia", -ese gran jugador que según el periodista americano Víctor Hugo Morales es el centro entre Maradona y los demás grandes jugadores- solía por esos lados, pegadito a su casa, pasear a su pequeño más guardián perro, quien revestía el nombre de quien se decía que incendió Roma, "Nerón".
Walter heredó su pasión por Racing Club de Avellaneda de su padre. Toda la familia es de la Academia, fanáticos de los colores del primer tricampeón de la historia, pero Wal es según palabras propias "no un hincha, un enamorado". Tenía 7 cumplidos cuando sintió en carne propia el dolor paternal por el descenso consumado al Nacional B. Treinta años despúes, la misma cruz que hoy sufre en carne propia Independiente y que asoma, aún lejano, el presente del club de sus amores.
Geminiano, nacido en pleno desarrollo de la dictadura cívico/militar, solitario por momentos, medido en sus palabras, escuchador más que hablador, amante del fútbol cien por cien, Walter reemplaza dotes futoblísticos en cancha por una sabiduría de la pelota lo que transforma a ser el director técnico desde que decidió alejarse de las canchas en los Abonos Super Ocho Vieites del año 2009. Y fue un técnico ordenado en el Gusvelito Fc 2008
Es el número 11 del equipo. Formó parte del Jove Torneo 1996, del recordado subcampeón Sin Conflicto Fc 98,, Material 2002, los 2003 Amante de la historia del revolucionario Ernesto "Che" Guevara, del técnico de fútbol Marcelo Bielsa y del ex futbolistas campeón, Diego Simeone, de fugaz rebeldía en sus tiempos de adolescente -fana de los Sex Pistols- en el cual solía lucir en su aún abultada cabellera Plasticola, Walter debe ser uno de los jugadores de mayores anécdotas fruto de su eterna buena voluntad en la cancha. "El ataja vos" o el córner de lanzamiento perfecto pero detrás del arco en la ex cancha Policía Federal de la calle Hornos, siempre son recordados en integrantes e hinchas de Jove y son el espejo del cariño por unos de los jugadores históricos y socio fundador del Jovellanos FC 1993.

Alejandro "El Flaco" Celaya

Si hay un integrante de Jove que no pasará desapercibido, ese es Ale. No solo por su casi dos metros de altura sino por alegría natural que contagia en el grupo. El Flaco -sobrenombre tan poco original como cariñoso- junto con Walter son las primeras chispas del equipo fundacional hacia comienzos del año 1992 cuando decidieron parar en la calle Jovellanos en la que habitaban dos futuros amigos Eduardito y Emi, en sintonía con otro en común que los conocía a los tres y luego sumaría a Edu; el hombre de la sonrisa eterna y los mil apodos, Dudu Iglesias, quien conocía los tres primeros de algunos años atrás. Vaya particularidad: los dos Eduardos de Jove se llaman también Javier de segundo nombre..
Y la pelota... Ale y Walter también fueron testigos y protagonistas de la casi batalla que se armó a fines del año 1991 en Campito Fútbol Club, que era en realidad, un baldío enfrente a la casa de Ale, la de las tres puertitas gemelas, de la calle Hornos que compartía con su familia Alberto, Bety, Tito, el hermano mayor y los menores María y Juan de casi 2 años de edad en ese entonces.
Nunca quedó claro el trasfondo de esa discusión entre integrantes de esos dos bandas de niños cuasiadolescentes que no tuvo de protagonistas a Ale, Wal, al futuro Dudu y a Emi, sino todo lo contrario. El origen de una nueva amistad que se quedaría para siempre.
Ale es acuariano y muy familiero. Y como tal fácil de hacer enojar. Eso sí, son enojos que se convierten rápidamente en risas. Y si alguien ha logrado hacer reír y sacar una sonrisa aún en tiempos de tristeza, ese es Ale. Siempre es más difícil hacer reír que hacer llorar.
El Flaco, ordenado y meticuloso, es un gran arreglador con sus propias manos. Tipo voluntarioso, detrás de su vozarrón y sus morisquetas, su mayor virtud es que nunca te abandonará. Hincha de Racing por mandato familiar pero revindicador de otras pasiones futboleras, al menos la de sus amigos -Boca y hasta el propio Rojo de Avellaneda jaja-, Ale es número 8 en la camiseta original jovelliana.  Formó parte de todos los torneos de Jovellanos. En la bifurcación jovelliana 1998, fue pilar de Deportivo Maradona y el técnico del Jovellanos Material 2002. Y no dudó en bancar a esos amigos jovellinos que se lanzaron a jugar dos partidos en el equipo jovellino LoqueLaPeraDejó 2007, efímera agrupación pero el primero en tener su propio escudo. Amante de los autos, de los camiones, desde hace años está radicado en la localidad bonaerense de San Justo, La Matanza. Ale, volvió sobre sus propios pasos: nació en Tandil, provincia de Buenos Aires,poco antes del golpe cívico/militar de 1976, aunque su corazón está en Barracas y en las calles de Hornos y Jovellanos.
El Flaco querido, detrás de esos primeros anteojos que resaltaron aún más sus faroles celestes, en los primeros registros históricos que se llevó el viento, fue goleador del equipo y uno de de mayores presencias. Socio fundador, tuvo un gran parate tras lastimar su rodilla en 2002 -en un partido amistoso con choque con el zapatero Juan Carlos- y volvió remixado y más parecido al Flaco Schiavi en los Abonos y Desafíos 2009/2010.
Allá va el Flaco con su Peugeot 504, del que se dio el gusto de dejarlo nuev, y de sus sucesivos vehículos, los "reno" 11, Clio, el Honda y el VW hasta cumplir su sueño de tener un Citroen, que no fue el 12V pero que resume a un hombre prolijo y cuidado como ruidoso que quiere a sus amigos como si fueran sus hermanos.

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Próximas entregas Eduardito Detus, Mato Vidal, Dudu Iglesias, Dieguito Zubeldía, Tito Garrone, Atila Celaya y Tumini.